Como me provocas, como me haces sentir! soy esclava de mis pasiones, amante de tu amar, quiero amanezcas entre mis caderas, con ese gesto de quien descubre con íntima satisfacción la silueta de su amante.
Quiero abalanzarme con fiereza a tu cuerpo, la que inspiras creer que solo me quedase hoy para amarte....
Vivo como vive la inocente abandonad al amor, enredada en un remolino absorbente al que no puede negarse, y en el que su ignorancia toma el color de la esperanza.
Necesito volcarme sobre ti mi amor, ya lloraré, si fuese preciso, y llegado el momento lo haré. Ahora solo deseo tu regreso; me alzaré en quijotesca lucha contra los titanes del espacio y el tiempo, y solo pido no estar aquí si no regresas.
Me siento estúpida en esta estación del absurdo donde cuestiones sin sentido me sitúan en la lejanía, indeseable compañera a la que rechazo una y otra vez aunque regrese acechante ya no le temo.
Bésame con el amor y la fuerza que destilas por todos tus poros. Con tus besos se me olvida el mundo, crece el cielo estrellado sobre mi espíritu y nada hay más poderoso que la plenitud de vivirte, aunque sea a cambio de morir después.
Ámame como si el tiempo estuviese contado y pronto no me vieras mas, y recuerda cada parte de mi cuerpo, por si ya no me encuentras, prueba los sabores que provoca en mi tu sudor , el ajetreo de tu amar.
Lo quiero, lo pido, lo anhelo, lo deseo. Cuanto más cerca menos heridas, cuanto más lejos más aniquilante.
